Stance x Mark Oblow: celebrando la singularidad como un valor en alza.

Moda,Streetwear |

febrero 3, 2020

Stance x Mark Oblow es la primera colaboración entre la marca californiana y el hombre del renacimiento del skateboarding. Mark Oblow es una de las personas más influyentes del mundo del patín. Rider, surfer, fotógrafo, ilustrador, muralista… la expresión artística forma parte de su estilo de vida. Stance acaba de ficharlo como embajador y ya forma parte de la exclusiva lista de #Punks&Poets que la marca ha reclutado para celebrar la singularidad como un valor en alza, aunque aún escaso hoy en día. La colección cápsula de Stance x Mark Oblow refleja a la perfección el leit motiv de Stance: #TheUncommonThread.

Stance x Mark Oblow, la colección

Compuesta por tres modelos de calcetines y un diseño de underwear, Stance x Mark Oblow es la primera colaboración del artista con Stance. Su carácter urbano y desenfadado, con doodles y combinaciones de color imposibles a spray la definen. Los diseños creados por Oblow combinan sencillez y fuerza a partes iguales. Los pequeños dibujos de monopatines y cuchillos a líneas ilustran perfectamente la singular visión creativa del artista. Al igual que el tercer diseño, la mezcla de colores sacada de un par de pruebas con las latas de spray. Ambos son fruto de la naturalidad de la expresión artística de un personaje que inspira a todos los niveles.

Mark Oblow, un personaje singular

Nacido en Hawaii y criado en California durante los 90s, ya en su adolescencia pasó a formar parte de la industria como skater y surfer sponsorizado. El arte siempre ha sido su via de escape, por ese motivo su carrera como pro evolucionó hacia puestos creativos clave en la trayectoria de varias marcas de renombre, como team manager y como director creativo. La fotografía también forma parte de su vida y pasión desde su época de skater. Durante aquellos años en los que patinaba con los héroes del patín, como Hosoi, Natas, Gonz, Cab, Tony Hawk, Lance Mountain, Tommy Guerrero, Gator y Jason Lee, entre otros, aprendió a administrar su tiempo, patinando y documentando momentos épicos de una época que marcó los inicios de la cultura del skateboarding.