El hábitat más natural de la apatía es un domingo de octubre. Justo a esa hora en la que te das cuenta de lo pronto que oscurece ya en comparación con hace apenas un mes, cuando temperatura y calendario coincidían en un inequívoco verano. Ese preciso momento en el que parece que no pasa nada en tu vida, y en el que crees, abatido, que nunca más volverá a pasar nada. Pues bien, en las antípodas de ese momento vital está un concierto de la banda Crystal Fighters. Y si ambos extremos coinciden, como fue el caso de su pasada actuación en Barcelona, ganan ellos. Porque cualquiera firmaría por vivir eternamente dentro de las canciones de los británicos, donde ocurren sin parar cosas increíbles, hermosas y mágicas.

Crystal Fighters: presentando nuevo disco en una inconfundible puesta en escena

Antes incluso de empezar a sonar su música, por ejemplo, ya habíamos visto a una especie de chamán quemar y esparcir la fragancia de un palo santo por el escenario. Por no hablar de la propia puesta en escena: preciosa, con flores en los pies de micro, telas africanas y más adornos.

Venían a presentar en directo su nuevo disco, «Light+», con el que han pretendido llegar a la raíz de lo que son Crystal Fighters y a cómo se sentían cuando empezaban a hacer música. Una gira programada por la promotora Houston Party para febrero, pero que tuvo que posponerse a octubre debido a que Seb, su cantante, contrajo la malaria durante su último viaje a Ghana.

Crystal Fighters

Un setlist infalible en Razzmatazz

De su nuevo álbum interpretaron ‘End The Suffering’, ‘Love x3’, ‘Multiverse’, ‘Tranquilo’ y ‘We Got Hope’ diseminándolas por un setlist que llenó hora y media de concierto. Además, no faltaron grandes éxitos de la banda como ‘Follow’, que sonó nada más empezar, ‘Love Is All I Got’; las infalibles ‘At Home’ y ‘Love Natural’, que sirvieron de falso cierre, o la mítica ‘Plage’, con la que finalizaron el show por todo lo alto.

No le costó mucho a Crystal Fighters meterse en el bolsillo al público entusiasta que reventaba Razzmatazz. Entre saltos y carreras de un lado a otro del escenario, una puesta en escena llena colores y una actitud totalmente entregada, la banda fue soltando hits fiesteros y coreables. El combo ‘LA Calling’ –  ‘We Got Hope’ – ‘Yellow Sun’, en los primeros compases del concierto, puso la maquinaria a pleno rendimiento.

Crystal Fighters

Crystal Fighters

Así, con un planteamiento rítmico monolítico y siempre acelerado, el público no dejó de bailar y disfrutar ni un segundo, basculando todo el rato entre 4ª y 5ª, y generando una especie de trance comunitario basado en una suerte de espiritualidad que, por repetida, no deja de ser efectiva para hermanar a público y banda.

Crónica y fotos : Pablo Luna

 

Comparte este artículo

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *