LEV Matadero 2024 inundó Madrid de fascinantes universos electrónicos, visuales y sonoros

LEV 2024 (Laboratorio de Electrónica Visual) celebro entre los pasados días 18 al 22 de septiembre, su sexta edición madrileña: LEV Matadero 2024. Fueron 4 días de actividades tanto pagas como gratuitas centradas en la exploración del audio y video, el arte digital, la realidad virtual y aumentada, la música, la electrónica y la experimentación. Cuatro jornadas de goce estético, de asombro y también de reflexión, acercando un pedacito de lo más interesante de la vanguardia electrónica y artística actual a la capital.

En las diversas salas, hangares y auditorios que conforman el Matadero, así como su patio central, pudimos recorrer -al igual que más de 14.000 asistentes en total-  universos visuales y sonoros, en su mayoría unidos por un hilo conductor temático de ambientalismo y crítica a la alienación de la vida hipertecnológica actual. Ademas, por supuesto, impactantes shows de artistas como plus44kaligula, NAH, Keeley Forsyth, Horma & Azael Ferrer o Moritz Simos Gesit, así como el acto de apertura, a cargo del dramaturgo italiano Romeo Castellucci, que presentó la videoinstalación performativa «The Third Reich», con sonido del músico experimental Scott Gibbons.

El espacio se prestó para que el festival sea un ameno paseo al aire libre, pudiendo elegir cómo recorrer sus diversas naves y así armar una propia experiencia customizada. Así lo vivimos desde OCIMAG, que estuvimos presentes en LEV Matadero 2024.

Ilusiones ópticas y realidad aumentada

Las sorpresas comenzaron desde el instante en el que llegamos: lo primero que llama la atención al pasar al gran espacio, en la Plaza Matadero (alrededor de la cual se ubican las salas y Naves que constituyen el complejo) fue la instalación «Alcove LTD», creada por el estudio de arte suizo Encor. «Alcove LTD» es una ilusión óptica montada sobre un contenedor reciclado, una caja de luces que atrapa el reflejo de los espectadores entre películas de cristal líquido. Misterioso y cautivante de día, con su función espejo y los reflejos de las personas yendo y viniendo, y un auténtico show de luces de noche.

Plaza Matadero también fue lugar de una obra impactante que no se ve a simple vista: «Slow Walker», propuesta de realidad aumentada de Peder Bjurman, donde a través de tu propio móvil y descargando una app, puedes revertir la escala del mundo natural y ver un oso de mar o tardígrado, el animal microscópico más antiguo del mundo, tamaño gigante y sobrevolando los cielos, acompañado de la voz en off de Abdul Mogard.

La exaltación del pixel en una muestra de arte digital taiwanés

Otra obra gratuita con la que era casi imposible no toparse, «Pixel Gods: Taiwan digital», que más que una obra es una curaduría de 3 obras diferentes emplazadas en la nave 0. Esta muestra hizo visible el trabajo de artistas taiwaneses con un elemento en común: la exaltación del pixel, valorado como unidad primigenia de la imagen digital.

Una sala oscura, pantallas, luces rojas y algo que parece un aula donde pupitres se orientan a una pantalla donde se proyecta algo entre un videoensayo, una conferencia y una clase. Las obras fueron «Gods of Water», de Kuang-Yi KU, donde tres pantallas exponen a tres dioses posibles, vistos a través de los que parecieran programas de tv de un futuro distópico tocando el tema de la crisis del agua en tres escenarios diferentes.

«Words Game», de TEAM9, es un videojuego donde hay que constituir figuras a través de píxeles, y cada píxel es un caracter tradicional chino; y «How To Improve Photo Quality by AI | Noise Reduction, Super-resolution Tutorial», del colectivo Simple Noodle Art,  hace reflexionar a modo de videoensayo sobre uno de los píxeles más famosos del mundo: el Píxel que representaba a la tierra fotografiada desde el espacio en la famosa foto Un punto azul pálido.

Realidad virtual cargada de mensaje y reflexiones sobre la era tecnológica actual en LEV Matadero 2024

Entre las propuestas más novedosas e impactantes del festival se encontraron las experiencias de realidad virtual, que causaron furor entre el público y agotaron por completo sus localidades. Visor y joysticks en mano, los espectadores fuimos invitados a sumergirnos en el mundo distópico y paranoico de «The Eye and I» (del artista visual chino Hsin-Chien Huang junto al reconocido música y compositor de música electronica Jean-Michel Jarre) y en el hedonismo de «In Pursue of Repetitive Beats» de Darren Emerson. La propuesta de realidad virtual se completó con «Namuanki», de Kevin Mack.

«The Eye and I» es una experiencia que propone tres relatos diferentes, cada uno de ellos dividido en subcapítulos. Yo escogí el tercero, inspirado en el concepto del panóptico de Michel Foucault. En el mismo sobrevolamos y recorremos a nuestro gusto -pero siempre con una sensación de circularidad, de estar yendo a ninguna parte- un mundo distópico de estética cyberpunk, y pasamos a estar de un lado y del otro del panóptico.

El mensaje final de este episodio, encontrándonos nosotros en el centro del panóptico y observando reclusos “sometidos” tanto como a reclusos “felices” que disfrutan de ser mirados, invita a una reflexión profunda, ¿son las redes sociales el nuevo panóptico? ¿Acaso hoy elegimos ser vigilados, y por lo tanto, castigados, regalando nuestras caras y nuestros datos por internet y buscando ser vistos por la mayor cantidad de gente posible?

Por otro lado,  «In Pursue of Repetitive Beats» brinda un mensaje mucho más optimista aunque nostálgico de un pasado que no volverá. Esta obra propone otro nivel de interactividad, y nos encuentra parados, recorriendo un espacio virtual y agarrando objetos con ayuda del joystick que nos ayudan a construir el relato.

La puesta visual entra y sale del realismo y nos traslada a los primeros años del acid house en Inglaterra, en un relato hilado por diversas voces y estructurado de manera coral: un grupo de amigos camino a la rave, oficiales de polícía, una radio pirata: todo para terminar en una rave y elevándose, a modo de experiencia extracorpórea, hacia un ciberespacio de estética de videojuego ochentero.

La nave 10, un nuevo templo de la música experimental

En la nave 10, espacio recientemente inaugurado dentro del Matadero para conciertos y performances, se desenvolvieron varios conciertos de música experimental que exploraron el formato audio-vídeo. La sala fue el claustro perfecto, con el tamaño justo para vivir una experiencia íntima, y un audio de alta fidelidad surround a medida de estas propuestas experimentales, envolventes y llenas de detalle.

Con funciones dobles al cierre de cada jornada, el viernes -con entradas agotadas- estuvo a cargo de plus44kaligula, cantante, productora y performer inglesa. Con una performance hipnótica con su impresionante voz como protagonista, plus44kaligula llevó al extremo la dinámica fuerte/suave, dulce/agresivo, yendo de los gritos a los susurros, del canto jazzero a la spoken word, sobre paisajes que superponían piano con drone y sintetizadores de inspiración trance en composiciones que deconstruyen la musicalidad tradicional.

Cuarenta minutos después llegó el turno de NAH, un cierre verdaderamente épico y contundente. El baterista y productor musical estadounidense brindó un show que sólo puede definirse como visceral. Sentado solo en la batería en el centro del escenario, oficio un set completamente rítmico con el pulso marcial y complejo del math rock y la rabia del punk. Detrás suyo, imágenes de violencia, alternadas con pantallas de colores plenos. El público, feliz, se notaba que lo esperaba hace tiempo. Y el set que ofreció fue tan crudo y catártico como sorprendentemente bailable y pegadizo.

Del minimalismo escalofriante de Keeley Forsyth al caos perfectamente organizado de Axontorr

Al día siguiente y en la misma sala, el cierre estuvo a cargo de Keeley Forsyth y Axontorr. La primera brindó una puesta minimalista y escalofriante. Dueña de una voz profunda y conmovedora que fue la absoluta protagonista y una presencia escénica entre una bruja y una sacerdotisa, con el rostro cubierto por su cabello y acompañada solo por su compañero en sintetizadores, la inglesa -que también es actriz, y se nota- presentó su último álbum The Hollow ante un público hipnotizado.

Toda esta tensa calma estalló en mil pedazos a la hora del segundo número, Axontorr. La dupla compuesta por Oliver Torr, artista multidisciplinar, compositor y diseñador de sonido checo, y Axonbody, nombre artístico del creador 3D parisino presentó un show de audio y vídeo en donde el par, enfrentado en el centro del escenario y delante de la pantalla, controlaba este caos organizado tanto visual como sonoro, con computadoras, instrumentos electrónicos creados por ellos mismos, guitarras y demás cacharros electrónicos. Imágenes de la naturaleza se fusionaban con síntesis de video y la abstracción máxima. Un caos perfectamente organizado donde momentos de extraña belleza y emoción se yuxtaponen con lo corrosivo.

Videoinstalaciones para la reflexión en LEV Matadero 2024

Varias videoinstalaciones fueron parte de la oferta gratuita de LEV Matadero. OCIMAG visitamos «Immersion», del británico Robbie Cooper, emplazada en la Cineteca. En una sala absolutamente a oscuras, rostros en primerísimo plano nos sorprenden, y observamos con gran detalle la gestualidad y los sonidos emitidos por personas muy diversas mientras juegan videojuegos, miran videos o interactúan por redes sociales.

La obra «Immersion» invierte los roles y pone al espectador en el lugar de la pantalla, del ser mirado. Una reflexión visual de alto impacto que indaga nuestra relación con el contenido online y las pantallas, y pone en crisis los límites entre mirar y ser mirado, entre el productor y el receptor, y entre la cámara y el espejo.

«The Alluvials», por su parte, de la artista californiana Alice Bucknell, es una película experimental situada en un Los Ángeles futurista. Con dos funciones nocturnas por día, la videoinstalación combina la teoría ecológica, la ficción especulativa y el diseño de juegos posthumanos para pensar la crisis climática, con una narrativa multiperspectiva que incluye puntos de vista humanos, animales y hasta de un río a lo largo de siete episodios.

Una propuesta interactiva para todos los públicos

LEV Matadero, por las condiciones de su visita, por las temáticas abarcadas y por lo interactivo de algunas propuestas, es también un gran espacio educativo ideal para que toda la familia disfrute y para despertar el interés de niños y adolescentes.

Si bien el oso de mar gigante de «Slow Walker» fascinó a los niños -aunque tambien a adultos-, la instalación que hizo carne en esto fue «Save the Planet», de INITI Playground, una propuesta multijugador con la que poder participar de forma activa en equipo nada menos que con el objetivo de salvar el planeta.

Integrando tecnologías de mapping y dirección de movimiento, «Save the Planet» es una propuesta divertida y novedosa que retoma elementos de dos juegos clásicos, que harán al atractivo de los niños y la nostalgia de los padres: «Space Invaders» y «Asteroids». Una gran manera de cultivar los valores de la sana competencia, el compañerismo y el trabajo en equipo así como la cultura del cuidado de nuestro planeta y la consciencia sobre la finitud de nuestros recursos.

LEV Matadero 2024, un espacio de la innovación, experimentación y concienciación al alcance de todos en Madrid

LEV Matadero 2024 se ha levantado como un faro de la vanguardia en arte multimedia y experimentación audiovisual. La magnífica disposición espacial de Matadero Madrid, así como el clima que ha acompañado durante todo el fin de semana (aunque parecía que no), ayudaron a lo democrático de la propuesta; miles de personas, de edades, géneros y contextos socioculturales se reunieron a pasar un buen rato en comunidad, aprender y dejarse sorprender de manera gratuita o por un precio muy conveniente.

El arte digital y multimedia, por la naturaleza misma de su dispositivo, suele indagar temáticas como la alienación, los dispositivos de vigilancia, la veracidad de la imagen y el lado oscuro del mundo hiperconectado y las redes sociales; cuestiones que atravesaron casi todas las propuestas.

El otro eje -inseparable del anterior- fue el ambientalismo y la crisis climática; ejes que son inseparables porque: ¿Cómo no vamos a estar disociados de nuestro entorno natural y su importancia si estamos constantemente abducidos por pantallas, por nuestros propios relatos sobre nosotros mismos? ¿Cómo podemos despertar si los dispositivos de control que utiliza el mismo Poder que destruye nuestro ecosistema y agota nuestros recursos llegan a nuestros mismísimos teléfonos?

LEV Matadero 2024 fue, durante cuatro días, un espacio para la innovación y la concientización al alcance de todos.

Crónica: Lola sasturain
Fotografías: Lukasz Michalak