Matus Toth: fotografía surrealista sin límites a través de la creación con inteligencia artificial

Desde que la inteligencia artificial llegó al alcance de todo Internet, cada vez son más los artistas que se suman a esta nueva herramienta para explorar más alcances en sus obras artísticas. Un ejemplo de ello es Matus Toth, fotógrafo y artista afincado en Praga, que trabaja tanto con la fotografía como con la IA para generar, como resultado final, un mix entre ambas disciplinas con imágenes surrealistas que representan una combinación exquisita entre lo mundano, la cotidianidad y la fantasía en el plano terrenal.

Si bien los límites de la inteligencia artificial todavía se están debatiendo, recordemos el speech de hace unos meses de FKA Twigs ante el Senado de EUA, esta nueva herramienta ha supuesto un antes y un después en todas las disciplinas artísticas, desde la literatura o las matemáticas, hasta la música y el arte. Así, Matus Toth ha sabido exprirmir su funcionalidad más creativa y la ha captado como generador de imágenes para añadir nuevos valores a sus fotografías. La unión de fantasía y realismo, crudeza e ironía, destacan en sus imágenes.

Desde edificios derritiéndose, hasta faros de coche hechos de un leopardo como mascota o rayos de luz cayendo sobre seres humanos. Imágenes que hace unos años tan solo podríamos imaginar a través de un blender en 3D, algo muy costoso y elaborado, o a través de ilustraciones, pero que ahora son elementos a crear de manera muchísimo más factible.

Matus Toth: picardía, acidez y mucho sentido ‘camp’

Además de crear estas obras con IA, Matus Toth también trabaja en fotografía editorial para revistas como Vogue, Bazaar o Esquire, entre tantas más. Pero volvamos a sufaceto como creador con IA  (@_tinbrain_) o, como él mismo dice, a su «alter ego que crea imágenes con inteligencia artificial». Porque, verdaderamente, no hay un hilo que conecte el singificado o estética de sus obras, sino que, más bien, son un vatiburrillo de lo que le viene en gana, y nos encanta.

Valores que sí destacamos con la picardía y cierto toque a un humor acido en sus obras. Ya sea una nueva versión del logotipo de McDonalds que se llevan volando pájaros, a dos androides hechos de cables besándose o un señor sobre una sandía gigante. Y, es que, ahí está su gracia, de ser capaz de crear cualquier tipo de imagen que le plazca. Ser camp no es algo fácil en nuestros días, pero, desde luego, Matus Toth lo es con sobresaliente.

Descubre la obra de Matus Toth en la web del artista.